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(UNCISAL - 2009)Entrevista a Woody AllenNUEVA YORK

Espanhol | Pronombres | pronombres personales
UNCISAL 2009UNCISAL EspanholTurma ENEM Kuadro

(UNCISAL - 2009)

Entrevista a Woody Allen

 

NUEVA YORK – Es más serio, más oscuro, más pesimista de lo que cualquiera podría imaginar. Woody Allen, uno de los más grandes cineastas de todos los tiempos, el creador de varias decenas de obras maestras, cree que la vida se divide entre lo miserable y lo horrible, que es una tragedia y que con la muerte todo acaba. Nada hay más allá, cree saber. Y eso lo fastidia.

Es el mismo Woody Allen, el de las gafas que son su marca registrada, el obsesivo e hipocondríaco, el admirador de Ingmar Bergman y el lector confieso de Jorge Luis Borges. Pero está distinto, más viejo.

– La crítica coincide en que con “Melinda y Melinda” ha retornado a la senda de sus mejores obras. ¿Usted se siente satisfecho con la película?

– Siempre he tenido una confianza extrema mientras escribo. Luego, cuando filmo, me siento más o menos cómodo, y después, cuando edito y veo lo que he hecho [chasquea sus dedos] toda mi confianza se desvanece. “¡Mi Dios! ¿Qué hice? ¡Tenía una percepción maravillosa... y grabé esto!”, pienso, pero no puedo tirar todo a la basura. Hago lo mejor que puedo cuando edito la película y me la saco de encima. Entonces entra la audiencia y a veces les gusta la película y a veces no, pero nunca saben lo que yo tenía en mente. A veces me gustaría decirles: “¡Ustedes no se dan cuenta de las ideas maravillosas que tenía y de cómo las arruiné! ¡Sólo han visto el 50 por ciento, el 20 por ciento de mi idea!” Si sólo pudiera rehacer mis películas, realmente podría hacerlas mejor. Así que, volviendo a su pregunta, no, nunca quedo feliz. Sólo una o dos películas me dejaron satisfecho en toda mi vida y no pienso decirle cuáles son.

– ¿Pensó en filmarla otra vez?

– No es tan fácil. Trabajo con un presupuesto muy bajo para los estándares de la industria. En Estados Unidos el costo medio de una película ronda los 50 ó los 60 millones de dólares, y ahora películas de cien millones de dólares son bastantes comunes, mientras que yo nunca consigo hacer películas de más de 12 ó 13 millones de dólares, por lo que no tengo el margen para rehacerlas. Filmar se ha convertido en algo prohibitivamente caro, en particular para quienes carecemos del dinero suficiente para armar algo parecido a “El aviador” [de Martin Scorsese, con Leonardo DiCaprio]. Recaudar semejante dinero es algo impensable para mí.

(www.adncultura.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=939615&origen=relacionadas )

La forma verbal carecemos, destacada en el último párrafo, tiene como sujeto implícito el pronombre

A

nos.

B

vosotros.

C

ustedes.

D

nosotros.

E

os.